Algunos analistas políticos sostienen que en Santa Cruz Cambiemos podría utilizar la misma estrategia política que utilizó en Capital Federal y la Provincia de Buenos Aires: polarizar con el kirchnerismo. Se sabe que la provincia patagónica es la región fetiche que desea el actual oficialismo, dado que es un ícono y un simbólico bastión de quienes gobernaron la Nación durante los años anteriores.
Sin embargo, el Frente para la Victoria (FPV) mantiene un piso relativamente alto de votos , lo cual le da chances de retener la Provincia. Según expertos, la clave estará en las alianzas. A la hora de elegir al enemigo perfecto, el candidato radical de Cambiemos, Eduardo Costa, apunta al kirchnerismo, dejando de lado al resto del peronismo, dentro del cual se encuentra el ex gobernador Daniel Peralta, con quien no busca confrontar.
El objetivo de Costa es que el oficialismo no gane adeptos, por lo cual no desea ser el enemigo a vencer por todos aquellos que se disputan la Gobernación. Así, muchos candidatos de distintas fuerzas disparan sus balas hacia la actual Gobernadora, Alicia Kirchner.
Por otra parte, el FPV tiene varios candidatos para encabezar sus listas, lo cual genera disputas internas y malestares. Costa buscará apuntar sus cañones para debilitar el Frente, y, de ser posible, generar alguna facción o disidencia que permitaí‚Â que algunos actores busquen jugar por afuera y quitarle votos al FPV, lo cual beneficiaría a Cambiemos.