Cinco preguntas a Ferreira Rubio: «Las primarias no son primarias sino una pre-primera vuelta

La académica Delia Ferreira Rubio participó de la serie de entrevistas de Argentina Elections – Elecciones Argentina y dijo que «en el orden presidencial, con candidaturas únicas por partido/alianza, las primarias no son primarias sino una pre-primera vuelta. Si la mayorí­a de los partidos se presenta con una sola lista, el efecto del voto del electorado se debilita». Destacó también la falta de información, y por consecuencia de interés, que tiene el electorado con respecto a estos comicios. Lea las respuestas completas de la Dra. Ferreira Rubio.

La entrevista forma parte de la serie “Cinco preguntas a… Los académicos tienen la palabra” que realiza el equipo de Argentina Elections – Elecciones Argentina a varias figuras del ambiente académico nacional e internacional para analizar los comicios de 2011. Para ver el resto de las entrevistas, visite esta página:https://argentinaelections-com.preview-domain.com/2011/08/cinco-preguntas-a-los-academicos-tienen-la-palabra/

Contribuyen en la serie: Juan Cruz Fernández, Mariano Machado, Luciano Romero Mascarell, Mariela Szejnfeld Sirkis

Hugo Passarello Luna: ¿Cómo cree Ud. que impactan las modificaciones a la reglamentación electoral en la democracia interna de los partidos, en relación a las experiencias previas?

Delia Ferreira Rubio: El impacto de la reforma en la democracia interna de los partidos no es claro. Hay dos aspectos a considerar igualmente significativos para lo que se denomina democracia interna: a) la elección de las autoridades partidarias y b) la selección de candidatos.

En el primer aspecto- que es casi más  importante que el segundo para saber cuán democrático es un partido- la reforma no cambia nada.

En cuanto a la selección de los candidatos, el sistema de primarias abiertas puede operar como un mecanismo de apertura y oxigenación de los partidos, al ampliar el universo de electores. Sin embargo, la reforma reserva a la cúpula dirigencial importantes recursos de poder en este área, como la determinación de las reglas y requisitos que debe reunir una persona o lista para competir en la primaria con el rótulo del partido.

En el nivel presidencial, lo que se ha visto es la determinación de los candidatos «por consenso», «a dedo» o «por autoproclamación», a pesar de que el Radicalismo y el Peronismo Federal intentaron otros procedimientos más democráticos que finalmente se frustraron. Ninguno de estos métodos es muy democrático.

En el nivel de diputados nacionales, la mayorí­a de los partidos y alianzas que se presentan van con una lista única, tampoco elegidas democráticamente. Son pocos los que presentan más de una lista. En los casos en que haya más de una opción, la conformación de las listas para la elección general dependerá de la respectiva carta orgánica partidaria. Si en ella no hay mecanismos equilibrados de participación en las listas, el avance democratizador será escaso.

 

HPL: ¿Qué efecto tendrá la reforma polí­tica en el sistema de partidos?

DFR: La reforma de 2009 tuvo el claro objetivo de desincentivar la formación de nuevos partidos y disminuir el número de los partidos registrados. En parte ese resultado se busca con las exigencias para el reconocimiento de partidos y con los requisitos para la confirmación y mantenimiento de la personerí­a.

Desde el punto de vista electoral, el sistema de primarias también apunta a largo plazo en esa dirección, especialmente por la exigencia de un piso mí­nimo de votos en la primaria para poder competir en la general. De las 10 fórmulas presidenciales que compiten en la primaria del 14 de agosto es probable que 3 ó 4 no superen el piso del 1,5% de los votos válidos emitidos en el paí­s.

 

 

HPL:  ¿Y en el electorado?

DFR: En teorí­a, las primarias fueron establecidas con el fin de dar mayor legitimidad a los candidatos, para que surjan de la voluntad del electorado y no sean el resultado de acuerdos de cúpula. Si la mayorí­a de los partidos se presenta con una sola lista, el efecto del voto del electorado se debilita.

En general lo que prima en este momento es la desorientación de la población. El humorista NIK, en La Nación, graficó muy bien la situación al decir que las encuestas ahora deberí­an incluir la opción «No entiende Ni le interesa». La campaí±a de información ha sido escasa y ha incluido declaraciones claramente erróneas de algunas autoridades electorales. Mucha gente se pregunta, para qué tiene que ir a votar ahora si no se decide nada.

El objetivo polí­tico perseguido por el gobierno al impulsar la reforma era evitar que -como habí­a sucedido en elecciones anteriores- varios candidatos del peronismo compitieran en la general. La idea era que Néstor Kirchner ganara la primaria y todos tuvieran que encolumnarse detrás de su candidatura en la elección general.

Las circunstancias hoy son otras. La importancia polí­tica de las primarias del 14 de agosto reside en que permitirá conocer de primera mano -y no a través de encuestas- cuál es la fuerza real de cada candidato. Al elector de la oposición le permitirá vislumbrar cuál de los candidatos es el que tiene más chances de reunir los votos necesarios para provocar una segunda vuelta.

Así­, en el orden presidencial, con candidaturas únicas por partido/alianza, las primarias no son primarias sino una pre-primera vuelta. Esto refuerza una particularidad del sistema de ballotage argentino que incentiva un voto estratégico en la primera vuelta, al establecer no sólo un piso de votos, sino una diferencia sobre el segundo para ganar en primera vuelta. En efecto, en la primaria muchos podrán votar «con el corazón» como dicen los franceses respecto de la primera vuelta del ballotage y votarán estratégicamente en la primera vuelta del 23 de octubre.

 

HPL:  A partir de la crisis de2001, hatenido lugar un aumento en la participación polí­tica de la juventud argentina ¿De qué modo caracterizarí­a dicho fenómeno?

DFR: Me parece que es importante la participación de la juventud en polí­tica. La democracia necesita ciudadanos y esos ciudadanos deben formarse desde la escuela.

Creo que el fenómeno del aumento de la participación de la juventud en la polí­tica, más que una afirmación, deberí­a ser un tema de estudio. ¿Hay mayor participación o hay una instrumentalización de los jóvenes? ¿En qué tipo de actividad polí­tica se involucran los jóvenes? ¿Cuáles son los espacios para los jóvenes en los partidos?

No creo que la creación artificial de movimientos de jóvenes subsidiados por el presupuesto público sea en realidad una prueba de mayor participación ciudadana de la juventud.

 

HPL:  ¿Cuáles son los logros y las materias pendientes de la democracia en nuestro paí­s, desde1983 ala fecha?

DFR: La democracia electoral -aún con sus falencias- es en sí­ misma un logro muy importante. Entre las falencias de la democracia electoral me parece que hay que mencionar, la intervención del Ministerio del Interior en el proceso electoral, la asignación del financiamiento público y la distribución de los únicos espacios para publicidad en medios de que disponen los candidatos. La autoridad electoral debe ser neutral y la cartera más polí­tica del gabinete no lo es y esto se aplica a cualquier partido en el gobierno. El mantenimiento del antediluviano sistema de boletas por partido, ni siquiera separadas por niveles de gobierno, es otra falencia de la democracia electoral. Finalmente es indispensable profundizar los avances que se hicieron en 2002 en materia de transparencia del financiamiento de la polí­tica que sufrieron un retroceso clarí­simo con la reforma de 2009.

Pero la democracia es mucho más que hacer elecciones cada dos aí±os. La democracia es también el respeto de los derechos y de la ley; la inclusión social y no el clientelismo; el respeto a la libertad de expresión y de trabajo y no la persecución a los que piensan distinto. La democracia es el respeto a la división de poderes y no el avasallamiento del congreso; es una concepción de poder limitado y no la idea de que quien llega al gobierno se transforma en dueí±o de los recursos públicos. En muchos de estos aspectos, lamentablemente hemos retrocedido o estamos estancados.

 

¿Quién es?

Abogada de profesión la académica Ferreira Rubio trabaja como consultora independiente  en programas de promoción de la transparencia especialmente en el área del financiamiento de la polí­tica; en materia de ética pública y en proyectos de auditorí­a y lucha contra la corrupción en Nicaragua, Brasil, Colombia, Peru, Paraguay, Honduras y Jamaica. Ha trabajado para la  OEA, PNUD, IDEA International, Banco Interamericano de Desarrollo (BID), NEEDS, Transparency International, CAPEL, IFES y otros organismos internacionales y ONGs.

Entre 2004 y 2010 fue miembro del Board de PODER CIUDADANO y entre 2008 y 2010 fue su Presidenta.

Es autora de numerosas publicaciones sobre Cultura Democrática, Instituciones Polí­ticas, Polí­tica Comparada, Gobierno por Decreto, Etica pública y parlamentaria, Financiamiento de los Partidos Polí­ticos y Sistemas Electorales, entre otros temas.

Delia Ferreira Rubio es Miembro del Board internacional de TRANSPARENCY INTERNATIONAL.

Para ver una biografí­a completa visitar: sitio oficial de Ferreira Rubio
Entrevista por Hugo Passarello Luna

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