Finalmente, tras largas especulaciones, la Unión para el Desarrollo Social (Udeso) ya tiene fórmula para la provincia de Buenos Aires: Francisco De Narváez-Mónica López. Si bien las listas para senadores y diputados nacionales ya estarían encaminadas siguiendo el acuerdo, no ocurre lo mismo con las intendencias y legislaturas provinciales del conurbano así como también con las del interior de la provincia. A tres días del cierre de las candidaturas, las negociaciones entre ambos frentes se encuentran en un impasse. Frente a ello, la Unión Celeste y Blanco amenaza con ir con lista propia a las internas. Sin embargo Alfonsín no resigna su empeí±o en lograr un acuerdo y evitar que la definición esté dada por el resultado de las urnas del 14 de agosto próximo.
Crédito de la foto:Â Â CC/Flickr/Santiago Trusso
De Narváez, junto a una peronista disidente
Sebastian Abrevaya
Página 12
23 de junio de 2011
La decisión ya está tomada. La compaí±era de fórmula de Francisco de Narváez será la diputada bonaerense Mónica López, una dirigente del conurbano, perteneciente al espacio peronista disidente. La definición se produjo en el marco de las delicadas negociaciones que mantienen por estas horas los hombres del radical Ricardo Alfonsín con los del Colorado, que amenazaron con dirimir en “internas†las listas de concejales. De Narváez y Alfonsín se reunieron el martes y ayer en Misiones, donde el peronista le comunicó su elección. Sin embargo, todavía estaba en discusión a quién le corresponde la cabeza de la lista de diputados nacionales y el primer senador, por lo que fuentes de ambos sectores no se animaban a cerrar el tema hasta que no se resuelva el combo completo. Los nombres en danza para esos cargos son, por la UCR, Miguel Bazze y Daniel Molina, por el denarvaísmo, José Scioli y, como extrapartidaria, Graciela Ocaí±a.
Hoy será un día clave para terminar de completar el rompecabezas de las listas de candidatos de la Unión para el Desarrollo Social, el frente integrado por la UCR y Unión Celeste y Blanco. Como en toda negociación, los dos sectores extremaron en estos días sus posturas. Ayer, el jefe de campaí±a del Colorado, el legislador Daniel Amoroso, deslizó que hasta podrían definir por elecciones internas los cargos “de intendentes para abajo†en los 135 municipios de la provincia. “Ahí no nos estamos poniendo de acuerdoâ€, aseguró Amoroso, que suele ser prudente a la hora de transmitir el malestar entre las partes.
López, dirigente de Avellaneda, es el nombre puesto para la vicegobernación. Los radicales lo aceptaron, pero reclaman en cambio el primer senador. De Narváez se resiste. Ese cargo tiene particular importancia porque, según prácticamente todas las encuestas, quien lo ocupe terminará adentro de la Cámara alta. El alfonsinismo habla de Juan Manuel Casella y el denarvaísmo de José “Pepe†Scioli, hermano del actual gobernador Daniel Scioli.
En diálogo con Página/12, Graciela Ocaí±a sostuvo que aún no resolvieron si encabezará la lista de diputados en la provincia o en la Ciudad. Según trascendió, tanto ella como De Narváez prefieren el terreno bonaerense, pero los radicales la necesitan para apuntalar su lista porteí±a, donde no tienen candidatos taquilleros que sumen votos a la fórmula Ricardo Alfonsín-Javier González Fraga. En los últimos días se conoció que lo tentaron al ex fiscal anticorrupción Manuel Garrido para la Ciudad.
En el radicalismo de la Capital hay cierta resistencia a meter dos extrapartidarios y relegar a sus propios legisladores al tercer y cuarto puesto. Además de eso, los candidatos radicales deberán competir con la lista de adhesión, que podría encabezar Federico Pinedo. En ese contexto, el Comité Capital enviará esta semana una carta a sus afiliados en la que manifiesta su apoyo a Alfonsín, pero critica duramente la gestión de Mauricio Macri.
Tensión y amenaza de ruptura en el frente UCR-De Narváez
Quilmes Presente
23 de junio de 2011
La negociación por las candidaturas se estancó. Y el denarvaísmo advirtió que iría a internas con lista propia.
Ricardo Alfonsín viene recorriendo el país en busca de potenciar su candidatura. Pero hoy deberá hacer un alto en su periplo de campaí±a para destinar buena parte de la jornada en procura de salvar el acuerdo que abrochó en la Provincia con Francisco De Narváez, que amenaza con quebrarse en medio de un fuerte tironeo por las candidaturas.
Como viene informando este diario, el armado de listas de candidatos en la Provincia entró en zona de turbulencias y ya hay advertencias de que podrían zanjarse las diferencias con internas el próximo 14 de agosto. Aunque en principio las listas de senadores y diputados nacionales están casi resueltas, la pulseada es ahora por las Intendencias y cargos legislativos provinciales tanto en el Conurbano como en el Interior bonaerense.
Según trascendió en fuentes partidarias, el conflicto terminó por estallar ayer por la maí±ana, cuando el radicalismo se plantó en la negociación y reclamó en todas las comunas del Conurbano dos concejales entre los primeros cuatro. Esa aspiración generó un dura reacción del denarvaísmo que la consideró «desmedida» y en medio de una fuerte discusión, la negociación quedó trunca.
Si bien estaba prevista otra reunión por la tarde, finalmente no se concretó, entre la falta de un punto de acuerdo y la aparición de fuertes declaraciones del denarvaísmo que amenazó con ir a internas en los 135 distritos.
Incluso, algunos dirigentes cercanos al «Colorado» sostenían que no se descartaba romper el acuerdo en la Provincia. «Vamos a cumplir con el compromiso de llevar la boleta de Alfonsín, pero en la Provincia iremos con Francisco como gobernador, nuestros legisladores e intendentes. El radicalismo que se busque los suyos», decían.
La queja de Unión Celeste y Blanco le apuntaba al reclamo radical en algunos distritos que sus dirigentes consideraban «imposibles de aceptar». Por caso, mencionaban la situación de Florencio Varela y Berazategui, entre otros distritos. «Ahí no tienen ni un concejal y piden la mitad de la lista. Así es imposible seguir negociando», decían operadores de De Narváez.
En ese contexto, el que blanqueó sin medias tintas la situación fue Daniel Amoroso, jefe de campaí±a de De Narváez. «Vamos a ir a internas en los 135 municipios para definir todos los cargos de intendentes para abajo, porque ahí no nos estamos poniendo de acuerdo», aseguró.
Por su parte, fuentes de la conducción de la UCR reconocieron que a tres días del cierre del plazo de presentación de candidaturas, la Unión para el Desarrollo Social (UDESO) «está en un momento de crisis por el armado de listas» y que las negociaciones están «suspendidas».
El conflicto sumaría otras aristas. Por caso, el radicalismo pretendería llevar candidatos a intendentes en municipios también pretendidos por el denarvaísmo. Un ejemplo es Luján, donde la UCR quiere apuntalar al concejal Oscar Luciani y la Unión Celeste y Blanco al concejal Pablo Tomini.
Sin embargo, integrantes de la conducción radical bonaerense consideraron que las internas para resolver candidaturas serían un «error», especialmente en el Conurbano, y se mostraron confiados en que en las próximas horas se retome el diálogo con el regreso de Ricardo Alfonsín de su gira por el interior del país.
Anoche, en medio del desconcierto y una tensión inocultable, De Narváez habría tomado contacto telefónico con Alfonsín, que se encontraba en Córdoba. El candidato presidencial, según trascendió, se comprometió a «ordenar la tropa» y moderar los reclamos para evitar que naufrague el acuerdo con Unión Celeste y Blanco.
Se complicó el cierre de las listas
Laura Serra
La Nación
23 de junio de 2011
Radicales y peronistas decidieron suspender las negociaciones por falta de acuerdo; no romperán su alianza
«Basta. Lo que ustedes pretenden para nosotros es inaceptable. Si no llegamos a un acuerdo, compitamos en elecciones internas y listo. Por ahora, levantamos las conversaciones.» Dicho esto, Daniel Amoroso se levantó de la mesa junto a Gustavo Ferrari y Alfredo Atanasof, el trío que representa a Francisco de Narváez en las negociaciones con el radicalismo para definir qué candidatos competirán en las próximas elecciones por la estratégica provincia de Buenos Aires.
A escasas horas del cierre de listas de candidatos, las negociaciones entre la UCR y De Narváez quedaron ayer en un dramático punto muerto. La tensión era casi palpable en las oficinas del candidato a gobernador bonaerense; después de toda una maí±ana de peleas y pujas, los representantes radicales partieron raudos hacia el comité nacional del partido a la espera de nuevas directivas. Enterado del asunto, el candidato presidencial Ricardo Alfonsín, de gira por Córdoba, estalló de furia y ordenó a los suyos encauzar las negociaciones. «La sangre no va a llegar al río. Al menos eso esperamos», confiaba, anoche, un dirigente muy cercano a Alfonsín.
El conflicto estalló cuando radicales y peronistas negociaban las candidaturas de la primera y de la tercera sección electoral de la provincia. Quien llevó la voz cantante del radicalismo fue Leopoldo Moreau, quien se apareció por las oficinas de De Narváez acompaí±ado por su hija Cecilia y su ladero Eduardo Santín. Los peronistas no podían dar crédito a lo que veían.
«El «marciano» vino a complicar todo. Las negociaciones venían muy bien hasta que llegó él y reclamó cosas imposibles: dos concejales en La Matanza, donde sabe que la UCR no existe, y lo mismo en Berazategui, Berisso y Lanús. Imposible competir ahí con radicales cuando ellos mismos saben que son distritos peronistas», contó a LA NACION uno de los operadores de De Narváez.
De todas maneras, desde ambos sectores buscaron no dramatizar demasiado el asunto.
«Está claro que a Moreau sólo le interesa llevarse un concejal, un diputado más a su redil. No le interesa ganar. Pero todos los cierres de listas son complicados. Lo vamos a resolver», deslizaban anoche algunas voces peronistas.
Estas complicaciones sobre el final frustraron la intención de De Narváez de anunciar, a más tardar maí±ana, la lista completa de candidatos que competirán en Buenos Aires por la Unión por el Desarrollo Social (Udeso), la coalición que selló con Alfonsín. De todas maneras, ya hay algunos nombres definidos; entre ellos el de Mónica López como casi segura compaí±era de fórmula de De Narváez. En tanto, José «Pepe» Scioli sería el primer candidato a senador nacional.
La vice de De Narváez
López es diputada provincial y una dirigente peronista de peso en Avellaneda; esposa del jefe de la Federación Sindical del Petróleo y Gas Privados, Alberto Roberti, López empapeló todo el conurbano con su foto junto a la de De Narváez. Tenía muy claro su objetivo: ser la elegida. Estaría a punto de lograrlo.
De esto dialogaron, anteanoche, De Narváez y Alfonsín, en Posadas. El candidato a gobernador peronista hizo un vuelo relámpago hacia la capital de Misiones para encontrarse con el radical, que se hallaba de gira proselitista. Alfonsín, cuentan los testigos, no objetó que De Narváez eligiera una figura peronista para acompaí±arlo en la fórmula. «Es una decisión tuya», lo apoyó.
Más discutida es, en cambio, la candidatura de Graciela Ocaí±a, ex ministra de Salud del actual gobierno. Alfonsín pretende que lidere la lista de diputados nacionales por la Capital, acompaí±ada por Manuel Garrido, ex titular de la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, pero De Narváez pretende llevarla como primera candidata en Buenos Aires. Los radicales pusieron el grito en el cielo: pretenden que el primer lugar de la nómina sea para Bazze. Lo que sí estaría acordado es que Nicolás Ducoté, ex director ejecutivo de Cippec y especialista en temas de transparencia, integre también la nómina bonaerense.
LUIS JUEZ: «ODIO A LOS PORTEí‘OS»
«Odio a los porteí±os», estalló Luis Juez, uno de los candidatos a gobernador de Córdoba. Si bien fue una expresión contextualizada por el partido de fútbol entre River y Belgrano de Córdoba, Juez quedó en una incómoda posición. Tras divulgarse el exabrupto, Juez pidió disculpas a través de su cuenta de Twitter: «Poco feliz mi frase con los porteí±os, DISCULPAS a todos. Jamás pretendí ofender. El fragor futbolero nos traiciona! Eso que soy de Talleres!», bromeó el senador nacional del Frente Progresista, en un intento de remediar un rapto de bronca.