Rodrí­guez Saá homenajeó a Menem y recibió el apoyo de Cavallo

El represéntate de la fórmula del PJ disidente organizó una cena en homenaje al ex presidente, Carlos Menem, el miércoles.
Por otro lado, en un discurso por el 30 aniversario de la Fundación Mediterránea, el ex ministro de economí­a, Domingo Cavallo, elogió las ideas económicas del candidato del Frejuli.


Rodrí­guez Saá, un homenaje a Menem y crí­ticas al Gobierno
Clarí­n
21 de Septiembre 2007
El lugar era todo un sí­mbolo, el restaurante «El General», la ocasión era propicia: la reunión mensual de la Peña Eva Perón, y los protagonistas, dadas las intenciones, los adecuados.
El miércoles, la fórmula del PJ disidente, Alberto Rodrí­guez Saá y Héctor Maya, organizó una cena de homenaje a Carlos Menem. Hubo ví­tores para todos y una enfervorizada interpretación de la marcha partidaria.
Después, Menem se despachó a su antojo. Castigó con dureza al presidente Kirchner y a su mujer y candidata, Cristina Fernández. Al adherir a una misa en memoria del ex titular de la CGT y dirigente metalúrgico José Rucci, asesinado el 25 de setiembre de 1973, Menem dijo: «Los amigos, sostenedores y cómplices de los asesinos de Rucci están en este gobierno». La muerte de Rucci fue reivindicada por la guerrilla peronista «Montoneros».
El ex presidente usó incluso cierto tono despectivo al hablar de Kirchner y de su mujer: «Esta gente -afirmó- es lo opuesto al peronismo. En este gobierno se ha profundizado la miseria y hasta tiene que sufrir nuestra patria que haya decenas de compatriotas que mueren de hambre en la tierra de los alimentos».
Tampoco evitó comparar su gestión con la de Kirchner y fustigar al Gobierno por la crisis desatada en el INDEC: «No se puede creer ya ni en las cifras del INDEC -dijo Menem- porque esta gente ha impuesto la mentira como sistema, pero ni siquiera con sus cifras mentirosas pueden comparar su performance con la de la década de nuestro gobierno. Dicen que están cerca de emparejar el PBI de los 90. Supongamos que sea así­. Lo que no emparejan ni por casualidad son los sueldos y las jubilaciones de nuestra época».
Rodrí­guez Saá dijo que habí­a querido estar en ese homenaje a Menem, «Un gran polí­tico a quien no sólo el peronismo, sino todo el pueblo argentino y la clase trabajadora, le deben tanto».
Cavallo: í¢â‚¬Å“Nadieme votarí­aí¢â‚¬Â
El diario de Párana
21 de Septiembre 2007
El ex ministro Domingo Cavallo reapareció públicamente con duras crí­ticas al Gobierno nacional, aunque también reconoció que no será candidato en las próximas elecciones porque í¢â‚¬Å“nadieí¢â‚¬Â lo votarí­a.
Cavallo fue el principal orador del segundo dí­a de festejos del trigésimo aniversario de la Fundación Mediterránea y aprovechó el acto también para elogiar a Alberto Rodrí­guez Saá, a quien consideró el mejor candidato a presidente para el 28 de octubre.
El ex ministro de Economí­a de Carlos Menem y Fernando De la Rúa dijo que los argentinos están viviendo un perí­odo de í¢â‚¬Å“oscurantismoí¢â‚¬Â porque no saben lo que pasa.
í¢â‚¬Å“Estamos a oscuras, pero no soy yo el que ahora pueda encender la luz. La luz se va a encender pronto, cuando la gente se de cuenta que la están engañandoí¢â‚¬Â, precisó.

Cavallo: «no vuelvo porque nadie me votarí­a»

26 Noticias
21 de Septiembre 2007
Cavallo sostuvo además que «volverí­a a tomar las mismas medidas económicas que en los 90» y que si viviera en la Argentina votarí­a a Alberto Rodrí­guez Saá.
«Me gusta el discurso que está haciendo Alberto Rodrí­guez Saá, el de sacar la mano de la economí­a. Si tuviera que votar a alguien, posiblemente lo votarí­a a él, pero no voy a estar en el paí­s», explicó Cavallo.
El economista respondió preguntas de periodistas, luego de una exposición de más de una hora en la que dialogó con un periodista, según habí­a previsto la Mediterránea.
En el discurso, Cavallo no descartó volver a la polí­tica. Ya lo intentó en dos ocasiones, la última fue en 2005 y decidió bajarse por la escasa cantidad de votos que obtendrí­a.
«Volverí­a a hacer polí­tica, pero como la gente no me vota, por ahora no lo haré». Fue el único momento en que el auditorio, de cerca de 150 personas, lo aplaudió con ganas.